Diversidad Sexual: Memoria, Verdad y Justicia - 30.400 desaparecidos

24.03.2016 16:31
Hace 40 años, el golpe de Estado cívico-militar instauró la dictadura más sangrienta de la historia argentina. Desde la Mesa de la Diversidad de Río Cuarto entendemos que es necesario reflexionar sobre la violencia estatal contra lesbianas, gays, bisexuales y trans (LGBT) llevada a cabo durante el autodenominado “Proceso de Reorganización Nacional”.
Queremos visibilizar y se sepa críticamente que la represión a nuestro pueblo argentino no excluyó la persecución a lesbianas, gays y personas trans como parte de los dispositivos de disciplinamiento social, político, sexual y de “higiene moral”.
“Conducta lesbiana”, “costumbres demasiados liberales”, “amanerado”, “temperamento afeminado”, “invertidos”, “amanerados”, “nunca se lo ve acompañado con personas del sexo opuesto”. Esas frases o palabras usó la Dirección de Inteligencia para describir situaciones de la vida de las personas. En esos archivos, más otros de la Prefectura, se evidencia un discurso punitorio sobre las sexualidades no heteronormativas. Durante la última dictadura cívico-militar hubo muchas formas de ser considerado “subversivo”. Ser estudiante, tener participación política o gremial, tener una sexualidad no heteronormativa, eran solo algunas de las razones para ser encerrado y torturado.
La represión de la dictadura cívico-militar hacia las personas LGBT no ha sido visibilizada ni tematizada socialmente, así como tampoco ha formado parte de ninguna causa judicial concreta. Por eso, entre las asignaturas pendientes y, en el marco del derecho a la verdad, reivindicamos el derecho a conocer, a saber qué ocurrió con los detenidos y desaparecidos de la comunidad LGBT, cómo ha influido la orientación sexual e identidad de género en la represión y, por fin, reconstruir sus historias militantes.
Ubicar las reivindicaciones del movimiento LGBT en el marco de los derechos humanos ha sido un largo proceso y desafío. Durante muchos años la variable de la diversidad sexual y de género no fue parte de la agenda política de ningún gobierno ni mucho menos de los medios de comunicación masivos. Solo para exponer como referencia, recién en el año 2007 se inició el proceso de reformas que eliminaron de los Códigos Contravencionales y de Faltas los artículos que abiertamente penalizaban la homosexualidad y el travestismo, utilizados para criminalizar nuestras identidades en manos de las estructuras policiales provinciales, que dieron lugar a innumerables razias, detenciones arbitrarias y tratos crueles inhumanos.
Los derechos de las personas LGBT son parte de los Derechos Humanos contemplados en la Constitución Nacional y los tratados internacionales que hacen mención específica de los mismos, entendiendo que, son derechos inalienables, sin importar las condiciones sociales, orientaciones sexuales, de identidad de género, religiosas, políticas o de cualquier índole.
Por todo lo anteriormente expuesto y como política de visibilización y lucha reivindicativa de nuestra comunidad LGBT, proclamamos junto a toda la ciudadanía “MEMORIA, VERDAD Y JUSTICIA”